Hablamos acerca del tratamiento EMDR, sobre el que nuestra clínica tiene una amplia experiencia, como ya os comentamos en nuestra página web.
Podemos definir el EMDR como un tratamiento que nos permite acceder a las emociones, las sensaciones físicas y los pensamientos negativos que se asocian a una experiencia traumática a través de la estimulación bilateral de ambos hemisferios cerebrales mediante movimientos oculares o taping.
Como dato, la Organización Mundial de la Salud ha reconocido y recomendado el tratamiento con EMDR en niños, adolescentes y adultos con trastornos de estrés postraumático. Además, ha demostrado eficacia y rapidez en el tratamiento de fobias, trastornos de ansiedad, trastorno obsesivo - compulsivo (TOC), trastornos alimentarios, duelo y patologías de la infancia como trastornos de conducta o hiperactividad, entre otros.
El tratamiento con EMDR se basa en el recuerdo que tiene esa persona acerca de las experiencias traumáticas que han contribuido a generar la patología o trastorno que presenta la misma. Dado que, en muchas ocasiones, la información relacionada con experiencias traumáticas o estresantes no se procesan completamente, las percepciones iniciales se quedan almacenadas exactamente igual que en el momento de entrada, junto a pensamientos negativos o percepciones vividas en el momento del hecho.
La EMDR se usa para acceder y enfrentar el recuerdo de las experiencias que contribuyeron a los problemas clínicos y a la salud. El objetivo es mover (a través de la estimulación bilateral) el sistema innato de procesamiento de la información para transformar las percepciones almacenadas de modo disfuncional. La focalización doble que hay en una sesión de tratamiento (prestar atención a los movimientos oculares y, simultáneamente a los elementos más significativos de la experiencia traumática) permitiría el procesamiento adaptativo de tales experiencias.