El lenguaje es la herramienta que solemos utilizar la mayoría de las personas para expresar lo que sucede en nuestra cabeza, nuestras ideas y pensamientos, por lo que, si sufrimos de algún problema en el lenguaje, nuestra relación con el mundo cambiará por completo. Por ello, desde Dislex Clínica de Psicología y Logopedia queremos centrar el foco de nuestro post en los cinco trastornos más comunes relacionados con el lenguaje.
1. Relacionados con el habla
Este tipo de problemas suelen suceder cuando un niño pequeño, en el momento en el que está desarrollando su lenguaje tiene tartamudez que le impide hablar con fluidez o no articula correctamente ciertos sonidos. Uno de los trastornos relacionados con el habla en niños menores de 5 años puede ser la dislalia, que afecta a la pronunciación de algunos sonidos y fonemas, como la “r” o la “s”. Otro trastorno puede ser la disglosia, que es un tipo de dislalia derivada de malformaciones en los órganos del habla que impiden la articulación de los fonemas.
2. Relacionados con el lenguaje
Si existe cierto retraso en el habla de nuestro hijo, así como si tiene dificultades para mantener conversaciones adecuadas para su edad, es importante acudir al logopeda, pues puede tratarse de un retraso en el uso del lenguaje, de una disfasia o un mutismo selectivo.
3. Relacionados con la lecto-escritura
El trastorno más conocido de este tipo de trastornos es la dislexia, que actualmente afecta a unos 700.000 alumnos en España y que sucede cuando el cerebro procesa el lenguaje de manera diferente a como debería.
4. Relacionados con la voz
Otro tipo de problemas pueden estar relacionados tanto con el timbre o intensidad de la voz, así como por el tono. Existen trastornos vinculados a lesiones en las cuerdas vocales que hagan al niño hablar muy bajo, aunque esto puede deberse a haber gritado demasiado. El logopeda se encargará de dilucidar si se trata de una disfonía u otro tipo de trastorno.
5. Relacionados con la deglución
Por último, entre los posibles trastornos, también se encuentra la disfagia que provoca el atragantamiento, que puede dejar en una posición incorrecta la lengua o provocar una falta de fuerza en los labios para luego pronunciar las palabras.